Todavía recorre mi piel
el fuego,
todavía corren hormigas en mi espalda
como cuando me abrasaste.
El perfume de las rosas
no alcansan par superar el tuyo
y ni el vinagre más fuerte
me permite olvidar tu olor
Todavía recuerdo como tus labios
ahogaban los míos,
Recuerdo mi mente perdida, absorbida
por una droga humana
El tambor de mi pecho
todavía dispara al pronunciar tu nombre
El corazón dispara sangre
porque lo exige mi sed de vos.
Recuerdo creer q eras diferente...
Y ahora vivo el fin